WhatsApp

Compasión y autocompasión

Compasión no tiene que ver con sentir lástima o ser indulgente. La compasión es un sentimiento de apertura y conexión con el otro junto con una actitud proactiva de querer mitigar su sufrimiento. En mayor medida todos conectamos con ese sentimiento compasivo cuando observamos sufrimiento.

La autocompasión, nos invita a darnos a nosotros mismos el mismo cuidado, consuelo y serenidad que de forma natural hacemos llegar a quienes queremos cuando están sufriendo, cuándo fracasan o cuándo se sienten inadecuados (Germer, 2011).


Y es que muchas veces en nuestra vida, nos encontramos haciendo frente a situaciones difíciles y nos sentimos desbordados con emociones como la tristeza, la rabia, el miedo, la preocupación, etc. En muchas de esas ocasiones, acabamos también enfrentándonos con nosotros mismos ya que además de sentirnos mal, sentimos que ser responsables y merecernos ese malestar: “Soy un estúpido”, “Me merezco que me pase esto”, “Núnca aprenderé”…


Cuando emociones, sentimientos y pensamientos desagradables nos desbordan, necesitamos encontrar un espacio desde dónde ser más compasivos con nosotros mismos y sentirnos acogidos en aquellos momentos en los que lo necesitemos. Ese espacio se encuentra dentro de cada unos de nosotros, se trata de entrar en él y fortalecer esa habilidad a través de la práctica de ser más amables con nosotros mismos.